|
Espacio
multimedia es una sección de CUADERNOS CERVANTES abierta a las nuevas tecnologías.
Queremos informar sobre las novedades relacionadas con los medios de comunicación
(audiovisuales, informática, etc.) y su aplicación a la enseñanza o a la investigación
de la lengua y la literatura españolas. La Redacción invita a los lectores a enviar
información sobre nuevos productos y servicios. cuadcerv@elr.es
|
Consideraciones sobre el uso de la tecnología en la clase de lengua
y cultura españolasLa autora presenta un interesante estado de
la cuestión y reflexiones en torno a multimedia en E/LE con la bibliografía
más significativa.
Teresa María Comojo Gómez University of
Connecticut
La
adquisición de una lengua extranjera es un proceso complejo. No sólo
consiste en la internalización de un nuevo vocabulario y estructuras, sino
que va mucho más lejos, ya que busca la adquisición de un modo completamente
diferente de entender el mundo. Siguiendo el artículo de Vicki Galloway
"Constructing Cultural Realities: Facts and frameworks of Associations",
el estudiante de una nueva lengua debe saber cómo dar sentido a una cultura
en sus propios términos. En cada cultura hay un ambiente de significado
único complejo, sus relaciones caracterizadas por la tensión y la
fluidez. Las formas dentro de una cultura están interrelacionadas y forman
redes que permiten el entendimiento entre sus miembros al mismo tiempo que conjugan
percepciones y limitan opciones en el momento de asignar significado a las observaciones
fuera de esa misma cultura.
Tradicionalmente la pedagogía
de las lenguas se ha centrado principalmente en los mecanismos de las destrezas
lingüísticas, dedicando muy poco tiempo a la tarea de desarrollar
el entendimiento de la cultura por parte de los estudiantes |
|
Tradicionalmente la pedagogía de las lenguas se ha centrado
principalmente en los mecanismos de las destrezas lingüísticas, dedicando
muy poco tiempo a la tarea real de desarrollar el entendimiento por parte de los
estudiantes de la cultura en la que se integra la lengua estudiada, particularmente
en aquellos aspectos relacionados con actitudes y valores. En las clases de lenguas
extranjeras ha habido una tendencia a reducir la cultura extranjera a trozos de
información simplistas e invariables. Esto ha llevado, en ocasiones, a
juzgar la otra cultura de acuerdo con los parámetros propios y a caer en
malos entendidos y opiniones equivocadas acerca de aquella. Pero este problema
puede ser evitado si permitimos que los estudiantes entren en la cultura y la
experimenten teniendo en cuenta su propia validez y coherencia. Un modo de conseguir
esto es utilizando textos auténticos. Como dice Vickie Galloway, los textos
auténticos, como acontecimientos de comunicación total, invitan
a la observación de una cultura que habla a sí misma, no a los de
fuera, en su propio contexto: a través de su propio lenguaje, en el que
las formas se refieren a su propia gente, que significa a través de su
propio marco de asociaciones, y cuyas voces muestran un juego interno dinámico
de individuos y agrupaciones de individuos dentro del consenso más amplio
que es la realidad de la cultura.
Siguiendo a Galloway, sería inmensamente importante
permitir a los estudiantes que interactúen con el material cultural a través
de discusiones en público o con informantes nativos. Los proyectos etnográficos
facilitan el desarrollo y el entendimiento de perspectivas culturales.
Durante décadas, la falta de atención a la cultura
debida a diferentes razones como las expuestas por Maritza Osuna en su trabajo
"Using the WWW to Integrate Spanish Language and culture: a pilot study",
ha llevado a una realidad descorazonadora. La falta de conocimientos por parte
del profesor, un entrenamiento inapropiado o libros de textos incompletos han
causado en muchos casos el conocimiento pobre de la cultura que están estudiando.
A pesar de todo, esta realidad ha sido por fin reconocida y en las últimas
tres décadas se ha empezado a dedicar una atención cada vez más
importante a la enseñanza de cultura como parte de la enseñanza
de un idioma extranjero. Este énfasis ha llegado al mismo tiempo que las
visiones contemporáneas acerca de la naturaleza del lenguaje. Como podemos
leer en Approaches and Methods in Language Teaching, Firth ya había
anticipado que la lengua tiene que ser estudiada en un contexto sociocultural
amplio de su uso, el cual incluye a los participantes, su conducta y creencias,
los objetos de discusión lingüística y la elección de
las palabras. La adquisición de la competencia comunicativa requiere una
diversidad de entendimiento cultural y tanto los teóricos de la lingüística
aplicada como el profesorado han empezado a comprender el papel intrínseco
que juega la cultura en el desarrollo de la segunda lengua.
Hoy contamos con los medios necesarios para luchar contra la
deficiencia previa en la enseñanza de lenguas extranjeras: el uso de la
tecnología permite a los estudiantes aprender en contextos y desarrollar
una amplia gama de competencias comunicativas y sociolingüísticas.
Representa un instrumento que conecta a los estudiantes con la cultura auténtica
porque puede darles acceso instantáneo a una amplia variedad de materiales
auténticos y situaciones para el aprendizaje cultural y un rápido
acceso a un contenido real inagotable.
Pero la investigación en el uso de la tecnología
para enseñar cultura es muy reciente. Las fuentes tecnológicas comenzaron
a ser usadas hace sólo tres décadas y esto es especialmente evidente
en el caso de una metodología tecnológica para la enseñanza
de cultura, la cual va muy por detrás de la enseñanza de lenguas.
Hay diferentes actividades que pueden ser puestas en funcionamiento
con el objetivo de incorporar tecnología on-line en una clase de
aprendizaje de cultura, asumiendo que ésta esté equipada con un
navegador y que los estudiantes tengan los conocimientos básicos para su
utilización. Estas actividades dan a los estudiantes una oportunidad única
para aumentar su acceso a materiales culturales de última hora y realia;
y para obtener una toma de conciencia global de la lengua que se estudia, en muchas
ocasiones solamente adquirida a través de la experiencia en el extranjero.
Peter y Barabar A. Lafforden en su artículo "Learning Language and
Culture with Internet Technologies" clasificaron este tipo de actividades
apoyadas por la tecnología multimedia de tres maneras diferentes: actividades
basadas en el texto, ya que hay muchas revistas y periódicos con ediciones
electrónicas en internet; las basadas en la percepción auditiva,
pues la radio y la televisión se pueden convertir en una fuente motivadora
para introducir cultura moderna en la clase; y las basadas en el vídeo,
con el beneficio de tener soporte visual del mensaje escuchado.
Las
tecnologías on-line interactivas que dan la oportunidad de poner
estas actividades en práctica permiten a los estudiantes negociar el significado
e interactuar entre ellos y con hablantes nativos y así desarrollar su
fluidez en la segunda lengua a través de la exposición al conocimiento
cultural. Los autores anteriormente mencionados nos dan una clasificación
útil de esas facilidades tecnológicas. Se pueden dividir en dos
grandes grupos: las asincrónicas y las sincrónicas dependiendo de
si no ocurren en tiempo real o sí. Entre las primeras encontramos el e-mail.
Puede ser fácilmente utilizado por los estudiantes para hacer y responder
preguntas sobre otras culturas, mantenerse en contacto con sus compañeros
o comenzar la comunicación con hablantes de los países de la cultura
estudiada. También los prepara para tareas del mundo real en un ambiente
tecnológico que se está convirtiendo en la norma. Los estudiantes
de dos culturas diferentes pueden además ponerse en contacto como amigos
por correo. Luego se les pueden asignar temas culturales semanalmente para explorar
juntos, alternando el uso de ambas lenguas, para ver diferentes aspectos compartidos
por las dos sociedades. A través de conferencias electrónicas y
Netgroups, se crea una estructura en la red para organizar temas, permitir
a los participantes que manden mensajes sobre dichos temas para que todos los
puedan leer y otros lectores los puedan responder, y así poder acceder
a esta actividad según la conveniencia del usuario. En el grupo sincrónico,
encontramos diferentes mecanismos que permiten a los estudiantes estar en contacto
a tiempo real. Esto puede ayudarles a desarrollar sus interlenguas al tiempo que
practican, negocian significado y reciben nuevo conocimiento lingüístico
y cultural de otros estudiantes o hablantes nativos. Entre estos, encontramos
salas de chat, programas para aprendizaje de disciplinas específicas
a larga distancia; conversaciones telefónicas vía internet o vídeo
interactivo usando tecnología CUSeeMe (www.stolaf.edu/network/iecc).
La
red da la oportunidad de "surfear" por ella en busca de sitios interesantes.
Los estudiantes tienen la oportunidad de leer información cultural y "viajar"
a países de habla hispana. Puede también ser una fuente de información
opcional y una inspiración sin límites para el diseño de
actividades basadas en contextos específicos. En su artículo "Technology
and Teaching Culture in the L2 Classroom", Zena Moore enfatiza el papel que
este instrumento tecnológico puede jugar en la enseñanza de una
cultura extranjera. Quizás no nos de una realidad virtual, sin embargo
puede permitir una inmersión parcial en la cultura foránea. Además,
da a los profesores la oportunidad de crear ambientes de aprendizaje más
auténticos, y a los estudiantes ambientes reales simulados donde pueden
poner a prueba una perspectiva limitada acerca de otra cultura, así como
todo tipo de prejuicios sobre ésta.
En su trabajo "Enhancing Foreign Culture Learning Through
Electronic Discussion" publicado en el libro New Ways of Learning and
Teaching; Focus on Technology and Foreign Language Education, Elisabeth Bernhardt
y Michael Kamil intentan probar la idea anterior. Ellos exponen la teoría
de que la tecnología puede permitir a los estudiantes adquirir un conocimiento
profundo de la cultura o la lengua que están estudiando desde el primer
momento del proceso de aprendizaje. Esto se logra cuando los aprendices tienen
la oportunidad no sólo de practicar la lengua sino también de discutir
aspectos culturales en su lengua nativa cuando su nivel de fluidez no les permite
hacerlo en la lengua destino.
Un esfuerzo por poner estas ideas en práctica fue el
proyecto cultural llevado a cabo por Gilbert Furstenberg, Sabine Levet, Kathryn
English y Katherine Maillet en su artículo "Giving a Virtual Voice
to the Silent Language of culture; the Cultura Project", donde llegan a la
conclusión de que para que la comunicación tenga significado, se
necesita saber cómo se desenvuelve o experimenta su propio mundo la gente
de la cultura estudiada. Esto debe ser realizado a través de una aproximación
pedagógica constructivista: los propios estudiantes deben construir su
propia comprensión de la materia en la que el lenguaje, la comunicación
y la cultura se entremezclan. Usando un método interactivo, los estudiantes
de dos ambientes culturales diferentes se darán cuenta de las diferentes
redes semánticas construidas en su propia cultura y en la de los otros.
Como consecuencia de todo lo anterior, se entenderán mejor entre sí
y su interés por la cultura del otro aumentará.
En el proyecto cultural los estudiantes deberían desarrollar,
con la ayuda del profesor, un entendimiento profundo de la otra cultura, la habilidad
de mirar el mundo a través de otros ojos, algo que solo podía ser
llevado a cabo en un ambiente de colaboración. Los estudiantes podrían
participar en ciertos actos sociales formando parte así de una "comunidad
virtual" de estudiantes que no sólo les permitiese tener acceso a
la cultura auténtica, sino también conseguir una participación
activa en ella. A lo largo del desarrollo del proyecto, la red resultó
ser un medio poderoso que ofrecía a los alumnos la oportunidad de comparar
y analizar materiales paralelos de sus respectivas culturas. La red no sólo
tiene la capacidad de destacar, yuxtaponer y conectar tipos de materiales diferentes
y múltiples, sino que también da a los usuarios la oportunidad de
comenzar una discusión sobre esos materiales por medio de un foro, donde
puedan intercambiar sus distintos puntos de vista y perspectivas, e intentar entender
la cultura del otro desde una perspectiva completamente nueva, incluso estando
a miles de kilómetros de los países donde se desarrolla el objeto
de su estudio.

En la descripción de la metodología se mencionan
una serie de estadios. Primero, ambos grupos de estudiantes debían responder
en su lengua materna a una serie idéntica de preguntas que aparecían
en la red; después, hicieron observaciones individualmente o en grupo y
analizaron las similitudes y diferencias que pudieron observar; en tercer lugar,
comenzaron un diálogo asincrónico con sus compañeros en el
que compartían sus observaciones, mandaban listas de preguntas para averiguar
más detalles o pedir clarificaciones y responder a otras cuestiones dirigidas
a ellos. Finalmente, una gran variedad de materiales se puso a su disposición
de modo que pudiesen poner sus propias observaciones iniciales y los comentarios
de sus compañeros en un contexto más amplio y objetivo.
Todas estas actividades ayudaron a los estudiantes a ser conscientes
de ciertas ideas que les proporcionaron un nuevo y abierto concepto de lo que
significa aprender otra lengua y su cultura. La aparición de respuestas
a las mismas cuestiones desde dos perspectivas diferentes trajo a la superficie
aspectos de la cultura no siempre visibles: debían cuestionar la asociación
inmediata de palabras incluidas en una cultura; la existencia de representaciones
mentales detrás de las palabras; la importancia y relatividad del contexto,
etcétera.
Teniendo en mente que la cultura y la lengua son componentes
complementarios de la comunicación, que uno sin el otro son siempre deficientes,
los objetivos mostrados por el proyecto Cultura pueden ser alcanzados en una variedad
de formas que la disponibilidad tecnológica, la imaginación del
profesor y el interés de los estudiantes puedan permitir.
Aunque todavía estamos lejos de incorporar la tecnología
de forma regular en las clases de cultura y lengua españolas, sí
se está poniendo una mayor atención en el uso de las telecomunicaciones
como un instrumento que puede conectar a los aprendices con la cultura española
auténtica. Los estudiantes pueden explorar culturas interactuando con sus
gentes, lugares y cosas y dándose cuenta de los paralelos con su propia
cultura, desarrollando al mismo tiempo habilidades de pensamiento. Algunos proyectos
han sido ya puestos en práctica, todos ellos comparten un esfuerzo por
integrar a los estudiantes de español en un ambiente que convierte la adquisición
de una cultura y su lengua en un proceso más afectivo y motivador para
ellos.
En
"Using the WWW to Integrate Spanish Language and Culture: a pilot study",
Osuna describe algunos ejemplos para actividades referidas a la lengua española
en concreto, usando internet de forma totalmente integrada en el trabajo de clase
y coordinándola siempre con los libros de texto. El proceso de creación
de estas actividades consiste básicamente en dos funciones principales:
primero, hay que asignar un tema de importancia a cada capítulo que se
trabaje durante el curso, y luego, pensar en el provecho que los estudiantes podrían
sacar en cada tema específico. Por ejemplo, una de las actividades que
Osuna proponía era planear un viaje familiar a Madrid, para que cada estudiante
buscara la mayor información posible sobre la ciudad: alojamiento, comida,
excursiones, visitas a museos, etcétera. En este caso, el uso de la tecnología
estaba contextualizando el libro de texto, algo que todos los profesores pueden
hacer fácilmente en sus cursos. Pero, a pesar de que todas estas actividades
pueden llevarse a cabo con normalidad mediante el simple acceso a internet, otros
proyectos muy diferentes se han experimentado con la ayuda de procesos más
sofisticados en los que se contaba con comunicaciones reales con distintos países
donde se hablase la lengua de interés para los alumnos. Así se describen
en "Virtual Study Abroad 101: Expanding the Horizons of the Spanish Curriculum",
un ejemplo de cómo la tecnología puede dar la oportunidad de expandir
el currículum hacia las direcciones más insospechadas, mostrando
que las deseadas posibilidades de estudiar en el extranjero por la mayoría
de los estudiantes pueden hacerse realidad mediante internet. En este proyecto
se preveía una estrecha colaboración entre dos grupos de estudiantes
americanos de español de distintos lugares del país. Mientras un
grupo era enviado todo un semestre a España, los otros, que se quedaron
en los Estados Unidos, estuvieron en contacto permanente con ellos, compartiendo
todas sus experiencias mediante la tecnología. Para ello, los estudiantes
de Kentucky estaban integrados en el proyecto desde el principio mediante diferentes
formas de contacto con sus compañeros ahora en Segovia: primero, les asignaron
a cada uno un estudiante en España y mediante el correo electrónico
tenía que presentarse y establecer una primera relación. Después,
y desde el momento en que los estudiantes se hubieran establecido en España,
podrían empezar a compartir aspectos de la vida diaria que estaban descubriendo,
y analizar con sus compañeros que se quedaron en los Estados Unidos las
distintas reacciones provocadas por las diferencias culturales. Más adelante,
los estudiantes de Kentucky podrían hacer un seguimiento de varias de las
actividades que hacía el grupo de Segovia, y llevar a cabo investigaciones
paralelas en internet, según las ciudades que visitaban, las fiestas que
viviesen, etcétera. Por último, los estudiantes de ambos grupos
se pondrían en contacto otra vez para hacer las observaciones finales a
cerca de su experiencia virtual de estudiar en un país extranjero.
En este caso, la mayoría de las personas que participaron
en el proyecto tenían los mismos antecedentes sociales, y un nivel similar
de la lengua española.
Otro tipo de colaboración estudiantil ocurrió
en la experiencia descrita por Josef Hellebrandt en "Virtual Collaborations
in the Spanish Class: from E-mail to Web Desing and CD-ROM Development".
Esta vez algunos proyectos culturales fueron llevados a cabo entre una clase de
estudiantes de español y un grupo social y ecologista de Ecuador: Propueblo.
Se establecieron dos tipos de colaboraciones básicas
entre ambos colectivos: un seguimiento externo de las actividades del grupo Propueblo
y un contacto de manera más intensa e interna con algunos de los equipos
destinados a trabajar en proyectos especiales, los instructores, los expertos
en recursos, etcétera. El intercambio de correos electrónicos entre
los alumnos de la clase y los miembros de la fundación fue muy fructífero,
ya que los estudiantes tuvieron la oportunidad de aprender sobre temas específicos
de la cultura ecuatoriana que más adelante irían desarrollándose
en forma de trabajos de investigación. En este proyecto, el contexto general
del intercambio también propició el uso de otro tipo de materiales
multimedia como la visión en clase de vídeos, la lectura de periódicos
o el análisis de documentos auténticos enviados por la asociación
ecuatoriana. La combinación de todas estas actividades permitió
a los estudiantes dar su opinión y colaborar con los diferentes equipos
de la fundación aportando nuevos puntos de vista o perspectivas a los problemas
que se iban tratando.
Como
podíamos esperar, los resultados y la motivación que obtenían
los estudiantes fueron increíblemente positivos. El contacto con un grupo
de personas nativas dio a los estudiantes la posibilidad de usar la lengua de
forma real, lo opuesto a ejercicios abstractos de gramática, lo que permitió
una adquisición de contenidos de manera auténtica y significativa,
y, a la vez, hacer que se sintieran involucrados de manera activa en la realidad
cultural de un determinado país. El proyecto culminó con una actividad
de expansión creativa, el diseño de páginas web que fueron
publicadas en la red.
Hemos visto, pues, una gran variedad de usos de tecnología
avanzada en un ambiente de enseñanza de la cultura. El acceso a materiales
contemporáneos auténticos hace más fácil esta tarea
al profesor de lengua extranjera, al usar diferentes tipos de documentos con amplios
contenidos como base para las actividades que faciliten la adquisición
de la segunda lengua, y que, a la vez, ayuden a mejorar el conocimiento global
sobre la cultura de la lengua que se está estudiando. Ya hemos visto que
una forma de motivar este tipo de orientación integradora en la clase sería
hacer ver a los estudiantes las semejanzas entre las dos culturas con las que
se juega, como una manera de evitar la formación de estereotipos negativos
basados en las diferencias interculturales. La búsqueda de características
comunes que superen a las diferencias, mediante el establecimiento de analogías,
es fundamental para la creación de una imagen positiva y cercana de la
lengua de interés en la mente de los estudiantes.
Como se ha demostrado en los distintos proyectos que hemos
visto, la tecnología nos puede proveer de una inmensa fuente de posibilidades
en el ámbito de la enseñanza de E/LE. Algunas de las actividades
que se han puesto en práctica hasta ahora nos muestran que internet no
se puede dejar de incorporar e integrar de manera definitiva para enseñar
cultura en la clase de lengua extranjera. La experiencia en sí puede resultar
óptima siempre y cuando haya un equilibrio entre la interacción
de los distintos elementos de los que se sirve normalmente el profesor. Los estudiantes
parecen responder mejor a los diferentes cometidos que tienen que realizar en
la clase de lengua extranjera cuando éstos están asociados a la
cultura del mundo real, y así se fomenta una comunicación más
auténtica. La cultura y la lengua llegan a ser así componentes complementarios
de la comunicación, que acaba por producir mejores resultados en la producción
lingüística de cada estudiante.
La tecnología no solamente sigue las últimas
tendencias en el desarrollo de las sociedades del mundo sino que también
se centra en las distintas modas metodológicas de enseñanza de las
lenguas extranjeras. La inclusión de mayor cantidad de contenidos culturales
en los currículos de los cursos de lenguas extranjeras ha ido de la mano
de los últimos cambios metodológicos con respecto a este campo,
en los que se enfatiza la importancia de la amplitud del contexto de la comunicación,
que va ligado con el incremento del uso de la tecnología.
Los métodos de enseñanza comunicativos, tan en
alza en estos días, pueden con certeza tomar ventaja de la tecnología
como una mina para el aprendizaje de una lengua y su cultura, ya que comprende
un gran número de condiciones óptimas para ser utilizada en clase.
Siguiendo las principales características del método comunicativo
descritas por Richards y Rogers en su libro Approaches and Methods in Language
Teaching, vemos que la tecnología puede ser el instrumento perfecto
para proveer a los profesores del material necesario. Permite dotar a la clase
de un rico contexto que enmarque la lengua de forma verista para que pueda ser
usada en situaciones auténticas. Propicia el mayor uso de la lengua haciendo
permanentes todas las estrategias para la comunicación. Selecciona la competencia
comunicativa, habilitando el uso de los sistemas más efectivos o apropiados.
La tecnología es el recurso que más motiva a los estudiantes, ya
que en sí es algo familiar a toda la sociedad, que se usa en todas las
situaciones de la vida real. Mediante la tecnología los estudiantes tienen
la posibilidad de controlar sus propios progresos o dificultades dentro del proceso
de la adquisición de la segunda lengua. Es una forma de hacer que los estudiantes
controlen su propio aprendizaje. La lengua es controlada de forma individual y
compartida con otros estudiantes, pero el profesor gracias a la tecnología
se convierte en un guía, lejos del papel central que normalmente está
destinado a representar en los métodos más tradicionales. Los estudiantes
aprenden mejor cuando las actividades que practican les dan la oportunidad de
comunicarse entre ellos, sin estar sometidos a la presión permanente del
instructor. Cuando, mediante la tecnología, sus intereses y preferencias
se ven satisfechos. La interacción en el aula se convierte así en
algo absolutamente necesario, deja de ser una cosa artificial con significado
sólo dentro de las aulas; tiene un propósito altamente interesante,
ya que ayuda a conocer nuevas realidades y perspectivas para los estudiantes.
También se sabe que la adquisición de la segunda
lengua es mucho más efectiva cuando ésta se usa como un instrumento
para aprender contenidos de cualquier tipo, que cuando el estudio de su estructura
es el punto de atención principal. Por eso podemos decir que la tecnología
multimedia, en esta ocasión en concreto internet, es un recurso productor
de gran motivación debido a la autenticidad de sus materiales, y que también
otorga a los estudiantes oportunidades únicas de conocer gente y practicar
sus habilidades lingüísticas con verdaderos hablantes de la lengua,
que pueden llegar a ser verdaderos colaboradores de los estudiantes al ayudarles
a comprender cómo comportarse dentro de los parámetros de la nueva
cultura en la que se están sumergiendo.
Bibliografía
• Bernhardt, E. y Kamil, M., "Enhancing
Foreign Culture Learning through Electronic Discussion", en New Ways of
Learning and Teaching: Focus on Technology and Foreign Language Education.
Boston: Heinle & Heinle publishers, 1998.
• Bush, M. y Terry, R., Technology-Enhanced
Language Learning. Lincolnwood: NTC Publishing Group, 1997.
• Chavez, C., "Students Take Flight
with Daedalus: Learning Spanish in a Networked Classroom", Foreign Language
Annals 30.1 (1997): 23-37.
• Cifuentes, L. y Shi, Y.C.D., "Learning
How to Teach Online: Preservice Teaching Experience", Journal of Online
Learning 10.3 (1999): 17-19.
• Cononelos, T. y Oliva, M., "Using
Computer-Networks to Enhance Foreign-Language Culture Education", Foreign
Language Annals 26.4 (1999): 527-34.
• Furstenberg, G., Levet, S., English, K.
y Maillet, K., "Giving a Virtual Voice to the Silent Language of Culture:
the Cultura Project", Language, Learning and Technology 5.1 (2001):
55.
• Galloway, V., "Constructing Cultural
Realities: ‘Facts’ and Frameworksof Association" en The Coming of age
of the Profession. Boston: Heinle & Heninle publishers, 1998.
• Hellebrandt, J., "Virtual Collaborationsin
the Spanish Class" J. Educational Computing Research 20.1 (1999):
59-70.
• Krasner, I., "The Role of the Culture
in Language Teaching", Dialogue on Language Instruction 31.1 (1998):
115-131.
• Lau, L., Distance Learning Technologies:
Issues, Trends and Opportunities. Hershey: Idea Group Publishing, 2000.
• Lee, L., "Going beyond Classroom Learning:
Acquiring Cultural Knowledge via On-Line Classrooms", Calico Journal
16.2 (1998): 101-20.
• Moore, Z., "Technology and Teaching
Culture in the L2 Classroom: An Introduction", Journal of Educational
Computing Research 20.3 (1999): 1-9.
• Osuna, M., "Promoting Foreign Culture
Acquisition via the Internet in a Sociocultural Context." Journal of Educational
Computing Research 22.3 (2000): 323-45.
• Osuna, M. y Meskill, C., "Using the
World Wide Web to Integrate Spanish Language and Culture: a Pilot study",
Language Learning and technology 1.2 (1998): 71-92.
• Pegrum, M. y Lancaster, R., "Teaching
culture in the Media Age: Cultural Studies in the Multimedia classroom",
Babel. 34.1 (1999): 16-19.
• Porter, S., "Technology in Teaching
Literature and Culture: Some reflections", Computers and the Humanities
34.3 (2000): 311-24.
• Richards, J. y Theodore, S., Rogers
Approaches and Methods in Language Teaching. New York: CUP, 2001.
• Rue, V., "E-mail Exchanges: Teaching
Language, Culture and Technology for the 21st Century", TESL Canada Journal
16.1 (1998): 88-95.
• Sandholtz, J. H., Teaching with Technology:
Creating Student-Centered Classrooms. New York: Teachers College Press, 1997.
• Schneider, J. y Von-Der-Emde, S., "Brave
New (Virtual) World: Transforming Language into cultural Studies through Online
Learning Enviroments", ADFL Bulletin 32.1 (2000): 18-26.
• Seelye, H., Teaching Culture: Startegies
for Intercultural Communication. Lincolnwood: National textbook company, 1984.
• Wood, A.F. y Smith, M.J., Online Communication
Linking Technology, identity and Culture. Mahwah: L.Erlbaum, 2001s web
Páginas web de interes
http://www.cervantes.es
http://www.mec.es
http://www.rediris.es
http://www.tuspain.com
http://www.diccionarios.com
http://www.languagetrade.com
http://www.red2000.com/spain/1index.html
http://www.bcn.es/castella/ehome.html
http://www.ucm.es/info/especulo
|